Eclipse Mental

Este fin de semana no fue especialmente brillante para mi. Al menos en cuanto a diálogos se refiere. Nos fuimos la pandilla a Arzooa, dispuestos a disfrutar del eclipse lunar y de la feria del queso. Jornada astro y gastronómica, queso y telescopio. Más friki, ni en carnaval.

Durante la cena ví que la cosa no estaba muy fiestera y quise animar un poco el asunto sacando un tema de conversación. Hasta aquí mi cabeza regía perfectamente. Pero justo después de formular este pensamiento, algo en mi cabeza debió de tomarse vacaciones, derrapar o romperse, porque lo que dije fue:

- ¿Sabeis que algunas botellas de refrescos contienen Benceno?

Por supuesto la cosa se animó, pero a mi costa. Si no fueran mis amigos creo que me hubiesen pegado. Yo también me hubiera dado una paliza. Pero como no hay mal que cien años dure, un par de copas más tarde, ya no había Benceno ni en la gasolina, y todo olvidado.

Yo creía que ese derrape mental sería un hecho aislado del fin de semana, pero hoy en Atractive, me resentí del esguince cerebral. Estaba enviando un fax (ya soy así de importante) y mientras, decidí darle conversación a la secretaria:

- ¿Que tal?, ¿viste el eclipse?

La verdad es que no sé que esperaba que me respondiera. Igual se me ocurrió que me iba a responder que sí. Que la alineación del Sol, La Tierra y La Luna constituían un perfecto ballet espacial y que llevaba años preparando el telescopio para este momento. Pero resultó que dijo que no, empeoró el concepto que tenía de mí y siguió a lo suyo.

Para evitar estos momentos, me dispongo a hacer una lista con temas de conversación de usar y tirar, de los que usas en el ascensor y en la cola del super. A ver que sale de todo esto...