Ya llevo un tiempo en Atractive y por mucho que lo intento, los fines de semana no me dejan ahorrar para un coche, así que de momento me conformo con ir a la oficina en autobús.
Como tardo un cuarto de hora en llegar, el viaje lo amenizo con algún libro que cae en mis garras: el último, La trilogía de Nueva York. Lo bueno del asunto es que el bus es suficiente para entretener a cualquier viajero, al menos la línea 3.
Llevo viajando en ella desde febrero tres veces al día y siempre hay algún loco. No gente pintoresca, ni divertida. Tampoco extravagante, excentrica o rara. No. Están locos de encerrar y tirar la llave muy lejos.
Hoy vine con uno que se pegaba y dialogaba consigo mismo, espero que la agresividad no la canalice hacia otras personas. Si no, estas podrían ser mis últimas líneas...
26 junio 2007
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1 comentario:
no parará el bus en algún frenopático y tú sin saberlo?
sábado sanin!!
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